Presentaciones efectivas. Grandes errores a evitar
A todos nos toca, antes o después, realizar una presentación en nuestro trabajo. A los jefes. A compañeros. A clientes o proveedores… Hacer una presentación es algo serio. Dice mucho de ti, de tu empresa y por supuesto, de aquello que quieres presentar. Existen tres aspectos a tener en cuenta a la hora de hacer una presentación. Qué queremos decir (el contenido), cómo vamos a decirlo (el documento), y quién lo va a decir (la exposición).
SOBRE EL CONTENIDO
Todas las presentaciones tienen un objetivo. Comunicar resultados, presentar una campaña, captar clientes… Hay que tener en cuenta quién tenemos delante para seleccionar qué contenido presentar.
CUIDADO: Dar demasiada información implica que no sabes seleccionar ni priorizar y dar demasiado poca implica que no cumples el objetivo de la presentación. Piensa bien lo que has de presentar y lo que no. Realiza un guión en un documento aparte antes de empezar a trabajar en el documento.
SOBRE LA PRESENTACIÓN
Sea con PowerPoint, Keynote, Prezi, Slides o el programa que elijas, lo cierto es que la forma es muy importante. Será el eje, el índice sobre el que desarrollaremos la presentación.
Ordena el contenido y preséntalo de forma atractiva y sorprendente. Pero siempre simple y creíble. No caigas en el exceso de recursos visuales (movimientos, transiciones, resaltes, etc…). Los recursos son muy útiles para dirigir a atención del espectador donde nos interese. Pero mal utilizados, podría parecer que queremos desviar la atención de un contenido demasiado flojo.
Recuerda que el documento está al servicio de tu discurso, que es lo importante, y no al revés. Si todo está en el documento y basta con leerlo, tu presencia sobra, y la presentación pierde su sentido. El público tendrá la sensación de que les haces perder el tiempo.
SOBRE LA EXPOSICIÓN
A veces se nos olvida la importancia de este aspecto, o pensamos que cualquiera puede realizar una presentación. No es así. No todo el mundo es capaz de hablar en público, o de expresarse con coherencia y desenvoltura. Escoger bien quién presenta es fundamental para el éxito. Debe demostrar que conoce y cree en aquello que se enseña.
Ponte de pie (es una muestra de respeto y permite tener una visión completa de la sala y de las reacciones de los presentes. Muévete, tu cuerpo te ayudará a poner más énfasis en los temas que quieras. Establece contacto visual y dirígete a tu audiencia directamente.
No leas, explica. Perderías el contacto visual y quedarías como un tonto. Si no eres capaz de entender lo que tienes que explicar, no debes hacer la presentación. El documento es un guión, lo importante lo debes decir tú. Sobre todo, ensaya la presentación. Da muy mala imagen improvisar sobre la macha.